Los tratamientos con láser Fotona ofrecen un método avanzado que consigue unos resultados perfectos en cada aplicación. Su tecnología láser trabaja con varias longitudes de onda permitiendo aplicarse sobre diferentes superficies cutáneas logrando actuar sobre todas las zonas faciales, eliminando las manchas y reduciendo la aparición de nuevas.

Este láser cuenta con 2 tipos de luz; Er:Yag y Nd:Yag, y la combinación de ambas permite conseguir magníficos resultados en cada aplicación:

• Er:Yag: Este láser es ideal para tratar capas más superficiales de la piel. Se utiliza para eliminar las células pigmentadas de la superficie, mejorando la textura y tono de la piel. Además, este láser estimula la producción de colágeno, lo que contribuye a un rejuvenecimiento general de la piel.
• Nd:Yag: Este tipo de láser penetra profundamente en la piel y es excelente para tratar manchas más oscuras y profundas. Su acción se centra en las capas internas de la piel, donde rompe los pigmentos de melanina que causan las manchas, sin dañar la superficie de la piel.

Sesiones de láser necesarias para quitar manchas de la cara

El número de sesiones de láser necesarias para quitar manchas de la cara puede variar dependiendo de varios factores, como el tipo de manchas, la profundidad de la pigmentación, el tipo de piel del paciente y la tecnología láser utilizada. En el caso del láser Fotona, que utilizamos en nuestra clínica en Valencia, las sesiones suelen variar de 3 a 6.

El coste de una sesión para quitar las manchas en la cara varía según tus necesidades específicas y el protocolo médico indicado. En nuestra estética en Valencia, ofrecemos una consulta inicial gratuita para evaluar tus necesidades y diseñar un plan personalizado. Accede a nuestros servicios online para ampliar la información o realizar tu reserva.

Sí, este tratamiento es apto para todo tipo de pieles, aplicando una mayor o menor intensidad del láser según el tipo de piel y su sensibilidad. En Benaes trabajamos para ofrecer, en cada caso, un tratamiento completamente personalizado a las necesidades de cada paciente.

El láser no provoca, en ningún caso, dolor. Sin embargo, sí que puede producir una sensación de calor en la zona tratada que puede no ser agradable, pero en ningún caso, dolorosa.